blog › bienestar › Identifica las causas del mal ambiente laboral y ponle remedio

Cuando hablamos del ambiente laboral, nos referimos a algo intangible pero que nos influye en todo momento. Se trata de un conjunto de condiciones y percepciones sobre nuestro entorno de trabajo, que nos influyen a la hora de desarrollar nuestras tareas. Las relaciones con los compañeros, con los superiores, las dinámicas de trabajo e incluso la decoración de la oficina puede influir en una impresión (buena o mala) del clima laboral. 

que hacer para mejorar el ambiente laboral

Lo que está claro es que condiciona, y mucho, cómo nos enfrentamos al trabajo cada día. Un mal ambiente laboral nos desmotiva y nos quita las ganas de esforzarnos. Por el contrario, un entorno positivo nos impulsa a crecer, mejorar y contribuir al equipo.

Entonces la pregunta es, ¿qué hacer para mejorar el ambiente laboral? Y sobre todo, ¿cuáles son las causas para que ese clima de trabajo no funcione? Identificar los problemas es el primer paso para ponerles remedio. Vamos a ello:

Causas del mal ambiente laboral

Liderazgos ineficientes 

La figura del líder es imprescindible en el engranaje de una empresa. Aprender a motivar a tu equipo es clave. Pero hay veces en las que los liderazgos no se ejercen como deberían: se abusa de la autoridad y del “ordeno y mando” sin hacer un esfuerzo por convencer o, por el contrario, el líder está ausente y deja abandonado a su equipo, que no cuenta con ningún referente al que acudir. Ambos casos son negativos y repercuten en el ánimo de los trabajadores.

Falta de comunicación

No saber comunicar tus ideas adecuadamente supone una pérdida de tiempo y esfuerzos; la confusión genera inquietud y malestar en cualquier grupo. Por eso, un ambiente laboral en el que no hay confianza para preguntar dudas y en el que no se establecen mecanismos eficientes para que la información se transmita a todos está condenado al fracaso.  

como debe ser el ambiente laboral en una empresa

No saber resolver los conflictos 

No existe un grupo de trabajo que no tenga conflictos y problemas a resolver; si conocéis alguno en el que todos se llevan bien todo el tiempo, ¡sospechad! Lo más probable es que sí tengan roces pero decidan guardárselos y no discutirlos. Esto es un error. El nivel de madurez de un equipo se demuestra en cómo aborda sus discrepancias y lidia con el mal ambiente. No hay que tener miedo a contrastar opiniones y afrontar los desacuerdos, sobre todo porque la alternativa generará más tensión con el paso del tiempo.   

Malas condiciones de trabajo 

Por supuesto, unas condiciones laborales que los trabajadores perciben como injustas van a afectar a su rendimiento y a su bienestar. Hacer un esfuerzo por cuidar a los empleados a nivel económico y con condiciones atractivas (horario flexible, actividades dinámicas fuera del trabajo) tendrá un impacto positivo a largo plazo. 

Falta de motivación 

Cuando tu trabajo no te motiva, acudir cada día a la oficina se convierte en un esfuerzo agotador. Las tareas muy rutinarias son los que más sufren esta condición y, sin un cambio de rutina cada cierto tiempo, la insatisfacción y la frustración se puede llegar a enquistar. 

Cómo debe ser el ambiente laboral en una empresa

Un ambiente laboral favorable es algo a lo que todas las empresas aspiran pero, más allá del deseo verbal, hay que apoyarlo en acciones reales. Para evitar las causas que hemos mencionado anteriormente, la primera receta es la comunicación. Una comunicación honesta y horizontal: crear la confianza suficiente para que nadie tenga miedo de levantar la mano y preguntar lo que no sabe; también construir una red fuerte para que la información llegue a todos y nadie se quede colgado. Aunque se invierta mucho tiempo en mejorar la comunicación, nunca es tiempo perdido; al contrario, es una inversión en crear comunidad y fortalecer lazos. 

ambiente laboral favorable

Otra de las claves es el buen liderazgo. El líder debe combinar el dar autonomía a sus empleados con ser un pilar para ellos, estar presente y ejercer una autoridad basada en la persuasión. Argumentar y dar espacio a los demás para aportar ideas, incorporarlas y funcionar como un único colectivo, no una suma de individualidades, es el reto mayor. 

Por último, no hay que descuidar el espacio físico. La decoración, la luz, el nivel de ruido... son factores que, sin darnos cuenta, afectan al estado de ánimo. Para ello, encontrar el mejor entorno es esencial: el alquiler de oficinas de Core te da la posibilidad de establecerte en un coworking con multitud de servicios. Privacidad, luz natural, acceso a zonas comunes para relajarse, salas de reuniones y acceso 24/7 con total libertad. Las oficinas de Core te dan un plus de profesionalidad que seguro que impregna el ambiente laboral en positivo. Dale una oportunidad y empieza de cero en un nuevo lugar preparado para tu éxito.